Si bien cada Casa relojera tiene su identidad en diseño, hay algunas que logran diversificar, evolucionar y sorprender con cada modelo, siendo fieles a sus códigos estéticos. Ejemplo de ello es Omega, cuyos relojes femeninos son únicos y con 100% el ADN de la firma.
Los relojes Omega nunca son serios, rebuscados o aburridos. Tienen tradición, pero son frescos; son funcionales y con la más alta calidad y proeza técnica, pero su diseño es moderno y vanguardista.
Todo ello también se manifiesta en sus modelos Trésor para mujer, los cuales representan a la perfección las mejores cualidades de la Casa en cuanto a estética femenina.
Prueba de ello, es que esta colección ha sido bien recibida por los clientes de la marca, siendo una de las más codiciados en la gama de relojes para mujer.
Con Kaia Gerber como rostro de la colección, estas piezas son clásicas, pero dirigidas a la mujer moderna. Mejor aún, la diversidad de colores y materiales ofrecen mayor autenticidad y opciones para diferentes personalidades.
De la misma manera, cuentan con una elegancia atemporal y frescura actual, algo que la firma expresa de la siguiente manera: la inspiración viene del pasado, pero han sido creados pensando en una nueva generación.
Malaquita y oro Moonshine
En esta ocasión, la Casa presenta una pieza excepcional con el color trend del año: el verde, siendo la malaquita en la carátula la que le otorga los tonos verdes profundos y brillantes. Por su aspecto elegante y acabado único, este material ha sido apreciado en la antigüedad, siendo utilizado en iglesias, catedrales y palacios.
Adicionalmente, si hay un lujo que se puede dar Omega, es elegir su aleación exclusiva, el oro Moonshine de 18 quilates, para complementar la malaquita.
Inspirado “por la brillante luz de la luna en un cielo azul oscuro”, este material es un tono más claro que el oro amarillo tradicional, mientras ofrece una alta resistencia a la decoloración y a la pérdida del brillo a causa del tiempo.
En esta pieza, el oro Moonshine se presenta en la caja de 36 mm, en los marcadores de hora con números romanos, en las agujas, así como en una de las opciones de brazalete disponibles: la pulsera de malla con un patrón similar a la seda. Como segunda opción, se encuentra la correa de cuero verde brillante.
Tal como se espera de un reloj de esta categoría, los diamantes son imprescindibles. Primeramente, la caja alberga 38 diamantes de talla completa, que se curvan a lo largo de los lados, las agujas están pulidas con diamantes, y un único diamante ha sido colocado en la corona, rodeado por una flor Omega en cerámica líquida roja.
En su corazón, late un movimiento de cuarzo de larga duración, el Calibre Omega 4061, que maximiza la autonomía de la pila, la cual tiene una vida útil de 48 meses.
Como detalles finales, ofrece cinco años de garantía, 30 metros de hermeticidad, cristal de zafiro y el fondo de caja es metalizado con efecto espejo.
Si bien las ediciones de los Juegos Olímpicos, los modelos de James Bond o los relojes que fueron a la Luna acaparan reflectores, los modelos femeninos son una apuesta complementaria que consolida con fuerza la oferta de Omega, manteniendo los altos estándares que distinguen a la Casa con un diseño impecable.
Ficha técnica
Movimiento: cuarzo “Long Life” (larga duración), para maximizar la autonomía de la pila; logotipo exclusivo Omega en rojo; con componentes rodiados y decoración perlada
Calibre: OMEGA 4061
Vida útil de la pila: 48 meses
Caja: oro Moonshine™; 36 mm de diámetro
Entre las asas: 18 mm
Carátula: Verde
Cristal: Cristal de zafiro, convexo, resistente al rayado y con tratamiento antirreflejos en la cara interna
Brazalete: oro Moonshine™; correa de cuero verde brillante
Hermeticidad: 30 metros.
Recuerda que estos y otros relojes de Omega están disponibles para ti. Consulta con nuestro Concierge (998) 109 0940, quien estará encantado de estar en contacto contigo.