El arte de combinar prendas, telas, texturas, joyería, relojes y artículos de vestir, es un atributo que pocos poseen. Quienes tienen un fuerte sentido de la moda, de la simetría y de lo estético, pueden permitirse romper ciertas reglas, sabiendo que, el resultado, será fascinante. Sin embargo, hay códigos de etiqueta generalizados que permiten orientar a quien desee vestir un reloj con elegancia, con conocimiento.
Elegancia no necesariamente refiere a usar esmoquin, traje o vestido de noche. Realmente, tiene que ver con el buen gusto. Puedes usar ropa deportiva y seguir siendo elegante. Y, por el contrario, podrías usar prendas de etiqueta y, por alguna razón, el resultado no ser el esperado.
En el caso de la elección de un reloj, hay algunos puntos que te permitirán orientarte, si a menudo te es difícil seleccionar el modelo adecuado para la ocasión. Si bien no hay regla que sea inquebrantable, el romperla, y aún conservar la elegancia y el estilo, requiere de conocimiento, habilidad e incluso intuición. No cabe duda que, estos casos, realmente son excepcionales.
Como punto de partida, te aconsejamos mejor orientarte con los siguientes consejos y, al final, tú siempre tendrás la decisión final.
El valor de tu reloj no entra en la ecuación ni determina si es apto o no. ¿A qué nos referimos con esto? Los materiales, el tamaño de la caja, los colores, las correas, los brazaletes, e incluso las complicaciones, son los aspectos que se tienen que considerar. Esto quiere decir, que el costo de un reloj no garantiza que se apto para cada ocasión.
Por ejemplo. Si tienes un evento de noche o formal, con camisa blanca, lo más recomendable es elegir un reloj de tamaño pequeño a mediano, atemporal y que ofrezca funciones sencillas, como minutos, segundos, horas y fecha. Esto le otorga un aspecto más limpio y menos cargado de elementos. De esta manera, será mejor guardar el reloj con muchas complicaciones para otra ocasión.
Si no quieres arriesgar, lo mejor para los eventos formales con corbata son las correas de piel color negro, así como los relojes discretos. De esta manera, los relojes considerados más clásicos, son aquellos en acero inoxidable o titanio; con carátula blanca, negra o azul; sin complicaciones; de un tamaño pequeño a moderado.
Ahora, hay ocasiones en que los relojes deportivos pueden darle un aspecto chic e interesante a la persona. Especialmente, cuando se desea romper un poco con la seriedad. Estos generalmente son fabricados en fibra de carbono, titanio, oro y cerámica, y se complementan con correa de NATO o caucho.
¿Qué pasa con los relojes de buceo o de aviación para eventos muy elegantes y formales? Al ser instrumentos diseñados específicamente para cierta actividad, es probable que el reloj rompa con la estética armoniosa generalizada. Por esta razón, por lo general, no se recomiendan.
Por otro lado, ciertos eventos sociales o de negocios, que no son de etiqueta o de noche, pueden permitir materiales de oro, e incluso lucir un modelo diver. Eso sí, la correa de piel siempre garantizará la formalidad.
¿Cuándo es momento de lucir el reloj de aviación, la complicación o el chrono? En las comidas o eventos casuales, pero no informales. Es decir, desde viajes de negocio, que permiten el uso de colores más claros de camisa y de traje, como comidas con socios o eventos familiares formales, pero que mantienen el tono casual.
En los eventos casuales más informales, como el salir a comer a un restaurante, e incluso para el uso diario, luce bien el brazalete de metal, el cual, no es apto para ropa de noche. ¿Por ejemplo? Es un buen match con el uso de jeans y camisas más relajadas. Asimismo, es un buen acompañante para los climas cálidos y en playa (al igual que el caucho), donde, por el contrario, no se recomienda el uso de correas de piel. También, como en la siguiente imagen, un traje color azul claro, pero sin camisa, y un brazalete de metal, es elegante, pero relajado a la vez.
Por otro lado, es necesario prestar atención a los zapatos y al cinturón. Lo mejor es comenzar con elegir estos dos elementos y, hasta el final, elegir el reloj que mejor va con la gama de colores. Justo por esta razón, las correas de piel intercambiables son una gran opción para sacarle un mayor provecho a tu pieza.
Para un evento en la noche, las correas de tonos oscuros son las ideales, mientras que, para el día, puedes optar por correas en tonos más claros, siempre y cuando vayan a juego con tu outfit.
También querrás fijarte en el material de la hebilla y otros detalles metálicos antes de elegir el brazalete o, incluso, el acabado de la caja de tu reloj. Seguramente ya lo sabes, pero el dorado va bien con el oro amarillo u oro rosado, mientras que el color plata va bien con el acero o titanio.
Otro consejo es que, si vistes colores cafés, beige, marrón o rojizo, el oro irá bien. Mientras que, si optas por el azul y los grises, el plata es el indicado. Si tu vestimenta es color negro, puedes optar por piezas con recubrimiento negro, plata y, en algunos casos, oro rosado.
¿Y los smartwatch? Desde el punto de vista más conservador, son ideales, únicamente, para el entrenamiento, ropa deportiva o, a lo mucho, ropa casual informal.
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