¿Qué pasaba en el mundo durante la década de los 70 que no sólo impulsó al ser humano a viajar en el espacio, sino que marcó un parteaguas en el diseño a partir de la tecnología? Con la carrera aeroespacial, la Guerra de Vietnam y la crisis petrolera de fondo, el diseño volvió a cuestionar el estilo internacional y comenzó una era enriquecida de estilos y propuestas. Adicionalmente, la entrada de la relojería regulada por cuarzo y el enfoque tecnológico modificó sustancialmente la propuesta de las Casas relojeras, y con ello múltiples modelos que “rompían” lo convencional fueron presentados: nuevos tamaños, formas geométricas e industriales protagonizaron el estilo sport chic y se apoderaron de la relojería para siempre.
Patek Philippe Nautilus – 1976
La historia del Nautilus de Patek Philippe inicia en 1976, no obstante la idea se gestó antes, 1974. Introducida en 1976, la firma buscaba un diseño fuerte y de personalidad inimitable, así como una caja camaleónica que albergara –sin ningún problema– cada complicación y movimiento fabricado en casa. Como fuente de inspiración para la confección de la pieza surgieron de manera natural los ventanales de las embarcaciones. Y fue así que la Referencia 3700/1 -fabricada en acero- constituyó el origen de un modelo que habría de convertirse en una de las series más emblemáticas de la relojería de alta gama.
Gérald Genta se inspiró en el “ojo de buey” de un barco y ofreció un bisel octagonal redondeado con bordes laterales que ayudan a unir al bisel con la caja. Destacó al conjunto gracias al diseño de una carátula con patrón horizontal de líneas que recorren de inicio a fin y por el diseño del brazalete totalmente integrado. El genio italo-suizo entregó los primeros bocetos a Patek Philippe en 1974, dos años más tarde la marca lo presentó. Su caja era inmensa para la época, 42 mm de diámetro. Considerado un reloj muy amplio en dimensiones para la época, Nautilus se estrenó para el mercado femenino en 1980 con calibre de cuarzo. Y posteriormente lanzó una versión más contenida de 37 mm de diámetro, por lo que el original fue denominado Jumbo. En sus más de 40 años el reloj ha tenido varios ajustes, no sólo en términos de movimiento y complicaciones. Sino estéticos, con reducción de tamaños y adición de metales preciosos para la caja y engastados para dial y estructura en general.
Bvlgari Bvlgari – 1977
Tomando la inspiración de una moneda romana, colocó la leyenda BVLGARI-BVLGARI en el bisel distinguido y robusto que siempre caracterizó a sus modelos. Esto fue un statement inmediato de marca que elevó el nivel de reconocimiento en relojería de la firma. Bvlgari compró Gérald Genta a una firma asiática que la había adquirido de su fundador a finales de los noventa. Este modelo pronto se convirtió en ícono y recientemente se presentó con ediciones en oro amarillo, rosa y carátulas opalina-negra.
Les Must de Cartier Tank – 1977
A diferencia de otras referencias del Tank de Cartier, la mejor cualidad central de Must es la moderación. Este reloj representa lo complicado de lo simple, y si bien no es ostentoso, sí decididamente elegante y juvenil gracias a la combinación de colores y carátulas. El acero jugó un tema central, mientras que los colores burdeos, azul marino y esmeralda fueron los protagonistas, recibiendo actualmente una reedición.
IWC Ingenieur SL – 1976
Ingenieur surgió como modelo a mediados de los años 50, sin embargo fue el fantástico diseño de Gerald Genta el que erigió a Ingenieur como un must-have watch. Cambiando por completo la estética elegante por una decididamente vanguardista. Genta esbozó otro ícono en el recién rediseñado Ingenieur. Elegante y sinuoso, con una imponente presencia en la muñeca, la primera referencia (1832), aumentó la dimensión del diámetro a 40 mm y se distinguía por su ancho bisel circular de cinco agujeros y su brazalete de eslabones en H bellamente esculpido. Los coleccionistas lo consideran un clásico del diseño y a nivel comercial es un éxito ininterrumpido, ya que fue el lanzamiento principal de la marca en 2017 y continúa sumando adeptos.
Chopard Happy Sport (Diamonds) – 1976
Desde 1976, Chopard ha establecido una sólida reputación e identidad al revolucionar la industria relojera con la línea Happy Diamonds. Por primera vez, se podían apreciar diamantes en movimiento entre dos cristales de zafiro en la esfera del reloj. Estos exclusivos relojes de diamantes flotantes, compuestos por diamantes que pueden moverse libremente entre dos cristales de zafiro, se convierten en una de las innovaciones de mayor éxito en la historia de la Maison. Actualmente, la línea Happy es sinónimo de gracia, dulzura y buen gusto, que describe a la perfección las colecciones femeninas de la marca.
Girard-Perregaux Laureato – 1974
Uno de los primeros relojes deportivos de acero de lujo, el Girard-Perregaux Laureato se lanzó al mercado en 1975. El reloj, que lleva el nombre de la película de los años 70 “Il Laureato” o El Graduado, hacía honor a su título; después de todo, fue un avance notable con respecto a los relojes anteriores de la Casa. Se considera que el Laureato es uno de los precursores de la categoría de relojes sport-chic, pues ayudó a definir lo que podría ser un reloj deportivo de acero de lujo. Con su diseño elegante pero deportivo, el Laureato ha seguido siendo popular entre coleccionistas y entusiastas a lo largo de los años, y actualmente no sólo se presenta en aceros y oros, sino también en cerámica, carbono y múltiples materiales.
Piaget Polo 79
Con la influencia estilística de finales de los 70, Yves Piaget y Efraim Grinberg (distribuidor neoyorquino) materializaron la colección Piaget Polo, un reloj que evolucionó las líneas geométricas marcadas de los 70 para ofrecer un diseño mucho más orgánico y presentado íntegramente en oro, con lo cual fusionó a la perfección el legado joyero y relojero de la marca. En aquel entonces el cuarzo se presentó como la revolución tecnológica y Piaget fue precursor de este tipo de movimientos, así que colocó el calibre 7P (el más delgado del mundo) en esta pieza. Este año de aniversario la marca presenta el Piaget Polo 79 con estética clásica pero que no ignora las necesidades y tendencias de nuestro tiempo.
Omega Seamaster Ploprof (600-1000), 1971
El Seamaster Ploprof 600 se presentó en febrero de 1971 en la feria de Baselworld, pero no llegó al mercado hasta abril de ese año. Se trata de un clásico, un reloj muy interesante que marcó un antes-después dentro de la relojería del submarinismo profesional. Para garantizar que el reloj sea preciso y consistente incluso a grandes profundidades, el reloj presenta un diseño de caja bastante inusual elaborado a partir de un solo bloque de acero es, sin duda, el reloj más reconocible jamás fabricado por Omega. Muchas personas confunden la historia del modelo y simplemente se refieren a él como Omega Ploprof. Técnicamente, este título se refiere tanto al Seamaster 600 como al Seamaster 1000. Hoy, Omega ofrece una nueva colección de Ploprof: el Seamaster Ploprof 1200M, que lleva el Ploprof a nuevos niveles.
Vacheron Constantin 222… 333… Overseas
La firma ginebrina presentó -en 1977- un reloj en celebración de los 222 años de la manufactura. Como sucedía en estas fechas, la marca ejecutó un diseño original de Jörg Hysek, que se desarrollaría en edición limitada a diferentes cantidades y que desaparecería en la década de los 80. Al 222 le continuaría el 333, que recuperaría algunas claves originales y agregaría cronógrafos y GMT. Sin embargo el Overseas, como nombre, nace en 1996 y sería producido hasta 2004 en su primera generación. Durante la época fue el objeto de deseo para los viajeros, su diseño icónico, deportivo y lujoso le haría competir con Royal Oak y Nautilus. Sin embargo el segundo cambio de generación corrió de 2004 a 2016. A partir de 2016 se recuperó la colección con una importancia excepcional para las operaciones de la firma. En esta tercera generación se destaca la intercambiabilidad de brazaletes por correa de piel y/o caucho, además de la adición de complicaciones como calendario perpetuo y tourbillon. Sin embargo el modelo base, automático de 41 mm en acero, continúa siendo el referente.
Longines Heritage Diver- 1971
Longines Diver destacó debido al boom de la relojería enfocada al buceo y exploración submarina. La versión del reloj de los años 70 fue diseñada con un fondo de carátula rojo vibrante para proporcionar una buena legibilidad bajo el agua, y recientemente se presentó un Heritage Diver que replica todo lo apasionante de esta pieza. Como tal, Longines mantiene algunas de las características únicas, como la caja en forma de cojín que mide 43 mm. En cuanto al dial, el fondo rojo se traduce en reflejos rojos y se le agrega Super-LumiNova® para una mejor legibilidad en la oscuridad.
Audemars Piguet Royal Oak – 1972
Su diseño único ha sido la admiración de los entusiastas de los relojes desde su primer lanzamiento en 1972. Este reloj deportivo de lujo fue diseñado por Gerald Genta, quien diseñó cada detalle que llevó a Royal Oak al trono.
Es la carátula guilloché Grand Tapisserie o su forma octogonal la que distingue al Royal Oak más que otros. Royal Oak allana su camino hacia la relojería moderna con una lista de mejoras, ya sea en el movimiento o en el diseño. Por ahora, la colección Royal Oak tiene más de 100 referencias y cada una de ellas es altamente valorada por los coleccionistas.
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