IWC rinde homenaje a uno de los más grandes de la historia del box, Muhammad Ali.
Sus momentos difíciles no sólo fueron arriba del ring. Así lo decía Cassius Clay, el boxeador al que mundo identifica como Muhammad Ali y hoy lo recordamos después de su muerte.
Su técnica a la hora de enfrentarse a sus contrincantes era tan precisa que parecía una danza y cuando se le preguntaba a qué debía su talento, Ali afirmaba que era el resultado de horas de entrenamiento para dominar la técnica y la enorme pasión que sentía por el boxeo.
“Era una mariposa que flotaba, al tiempo que picaba como una abeja”, y al entender esta frase del mítico atleta sabemos que hace referencia al equilibrio.
Campeón olímpico en los Juegos de Roma en 1960, su éxito se cruzaba con la Guerra de Vietnam, el conflicto que atormentó a los estudiantes de la década y al que Ali se negó a ir a través de una serie de declaraciones polémicas.
Atleta sin igual y gran personaje de la historia, Muhammad Ali vivió por más de 30 años con la enfermedad de Parkinson pero nunca dejó de promover el deporte y recaudar fondos para encontrar una cura al mal que lo afectaba a él y a otras miles de personas en el mundo.
Su fundación fue apoyada por múltiples marcas y entre ellas la casa relojera IWC, que en el 2012 lanzó una edición especial de su modelo icónico “Big Pilot”. Esta pieza sería casi tan legendaria como el boxeador y, como él, sería la más precisa del mundo.
Este reloj tiene grabado en el fondo de la caja la firma del atleta y se trata de una pieza única con calibre automático 51111 con reserva de marcha de 7 días. El modelo fue subastado por 60 mil dólares durante el evento Ali’s Celebrity Fight Night Gala del mismo año.
¡Descanse en paz este grande del boxeo!