Si te has preguntado por qué un reloj mecánico cuenta con la leyenda “21 jewels” o alguna similar. No significa que tenga 21 diamantes, pues esta inscripción no corresponde al engaste de piedras preciosas, sino al número de cojinetes de minerales sintéticos utilizados en la maquinaria.
¿Cuál es la función de las joyas del reloj?
Este número corresponderá al nivel de complejidad y fabricación del calibre que da vida al reloj. Por lo que mientras más joyas, posiblemente sea mayor el costo, pero no por el número de éstas.
El número de piedras-joyas obedece a reducir la fricción inherente a la transmisión de la energía.
Deberás saber que las piezas móviles generan fricción al cumplir con su función. Con el paso del tiempo ésta se convierte en un enemigo natural de los materiales con los que está fabricado tu reloj. Al hablar de micras y de resistencias mínimas, tu máquina de precisión podría sufrir variaciones al mostrar la hora correcta, principal función relojera.
¿Qué son las joyas de mi reloj y para qué sirven?
Los relojes mecánicos utilizan aceites como lubricantes, pero cuando éste se pierde o desgasta, el metal roza contra diferentes elementos. Ello ocasiona un pulido indeseado que elimina materia de los componentes. Los primeros relojeros utilizaron joyas para unir diferentes ébauches, del reloj. En castellano les llamamos cojinetes, rodamientos.
¿Por qué se llaman joyas?
Recordemos que la relojería tiene siglos de historia. Los primeros relojes de bolsillo surgieron en el siglo XVI (1524 por Peter Henlein). En ese entonces la tecnología era limitada y por ello se utilizaban piedras preciosas para cumplir con la función.
¿Por qué se usaron joyas?
Por su dureza, recuerda que el diamante es el elemento más duro del planeta. En la escala de Mohs cuenta con un grado 10. Mientras que el rubí porta el 9. El acero, la alpaca, el German silver, cobre, estaño, bronce y otros metales con los cuales están fabricadas las ruedas y componentes de la pieza, son mucho más suaves. Por lo que no ofrecen desgaste a los cojinetes.
Actualmente no se utilizan piedras preciosas debido a su alto valor y a la enorme cantidad que se necesitaría para abastecer al mercado relojero. Desde hace décadas, se utilizan corindones sintéticos. Que se producen a partir del óxido de aluminio, el cual forma el mineral posterior al incremento de la temperatura.
Funcionan como sitio para ingresar al eje que –a su vez– se acopla a un engranaje de reloj. Su forma, de dona o círculo, también albergará el aceite o lubricante utilizado para mejorar el desempeño.
Existen otro tipo de joyas que no cuentan con agujeros en el centro y cumplen funciones diferentes. Para fijar un eje y evitar su desplazamiento vertical, también son necesarias otro tipo de “joyas”. Estas piedras son utilizadas en mecanismos antichoque como el Incabloc, que sirve como amortiguador ante una caída del reloj sobre una superficie dura.
Finalmente, los rubíes sintéticos o corindones, también se utilizan en el escape suizo tradicional o en otro tipo de escapes. Están fijados al áncora y golpetean la rueda de escape, liberando y bloqueando en sus diferentes pasos.
¿Es más caro un reloj con más joyas?
Sí, al menos en el 90% de los casos. Ya que la cantidad de joyas es proporcional a la complicación del calibre y sus funciones. Sin embargo, el uso de nuevos materiales que soportan el desgaste y la fricción de mejor manera, minimiza la necesidad de utilizar joyas en algunos sistemas.
Consulta la disponibilidad de nuestros relojes con nuestro Concierge al (998) 157 9954, quien estará encantado de atenderte.