Lo decimos sin temor a equivocarnos: el Open Gear Purple Haze es una de las piezas que mejor representan la evolución de la relojería impulsada por el uso de colores atrevidos e intensos que antes eran impensables. Chronoswiss es experta en este tipo de creaciones, que, además, mantienen la elegancia y la calidad mecánica y artesanal de una de las firmas independientes más interesantes de los últimos años.
Desde que Gerd-Rüdiger Lang fundó Chronoswiss en 1983, la marca ha dejado claro que el secreto de su éxito reside en hacer las cosas a su manera. Su innovación está respaldada por los estándares más altos de la relojería suiza, lo que da como resultado piezas únicas. Bajo el mando de la familia Ebstein, sus dueños desde 2012, muchos de sus modelos han adoptado un diseño de colores eléctricos y vibrantes, aunado a técnicas que ya son inseparables de la firma, como el guilloché hecho a mano.
El primer reloj de Chronoswiss fue también el primer cronógrafo mecánico del mundo con fase lunar y reverso de cristal de zafiro transparente. En 1988, fue la primera en fabricar en serie un reloj de pulso tipo regulador, es decir, que indica de manera separada los minutos, las horas y los segundos. Esta primicia se lanzó en la distintiva caja de la Casa, con bisel estriado y corona cebolla. Más adelante aparecieron el Grand Régulateur, el Opus (el primer cronógrafo automático esqueletado fabricado en serie) y el Chronoscope (el primer cronógrafo automático con regulador).
Con Oliver Ebstein al frente, Chronoswiss abrió un nuevo taller en Lucerna, Suiza. En 2016, presentó el afamado Flying Regulator Manufacture, el primer diseño tridimensional con indicadores de regulador que flotan sobre la carátula, seguido del Flying Grand Regulator Skeleton y el Flying Regulator Open Gear Anniversary Edition, el primer reloj de este estilo con un grabado guilloché hecho a mano.
El Open Gear Purple Haze es una edición limitada a 50 ejemplares con una caja de 41 mm en acero recubierta con deposición química de vapor (CVD) de color púrpura. La colección Open Gear se caracteriza por tener una carátula en dos niveles. El disco metálico inferior tiene una decoración guilloché con diseño ondulado que se realiza con la ayuda de una máquina centenaria y se recubre con CVD púrpura. Los juegos de luz sobre esa superficie no se parecen a nada que hayas visto.
El nivel superior tiene una subcarátula en forma de embudo para visualizar las horas a las 12 y otra para los segundos a las 6. Además, está el anillo de la escala de los minutos, unos puentes esqueletados atornillados y las manecillas con Super-LumiNova. Al ser un reloj tipo regulador, la manecilla de los minutos ocupa el lugar central. Lo impulsa el mecanismo calibre C.299 de cuerda automática con un rotor esqueletado recubierto con el mismo CVD púrpura que la caja y la carátula.
Si buscas un reloj raro en el mejor sentido de la palabra, con una personalidad única y perfectamente bien ejecutado, este Chronoswiss es para ti. Por si fuera poco, tiene uno de los mejores nombres de la relojería: Purple Haze, como la inolvidable canción de Jimi Hendrix.
Ficha técnica
Caja: 41 mm, acero, CVD púrpura
Calibre: C.299, automático
Reserva de marcha: 42 horas
Funciones: minutos centrales, horas descentradas, segundero pequeño
Carátula: multinivel, guilloché, CVD púrpura
Correa: textil, negra
Hermeticidad: 100 metros
Limitado a 50 piezas
Para disponibilidad de piezas de Chronoswiss, consulta con nuestro Concierge (998) 157 9954, quien estará encantado de estar en contacto contigo.