Este año ha sido muy especial para Montblanc y su relación con la aventura. La Casa se ha enfocado en el alpinismo y en el Mont Blanc, la cumbre más alta de los Alpes y de Europa Occidental que inspiró su nombre. Y los resultados han sido realmente emocionantes.
Uno de los embajadores de la marca es Nimsdai Purja, un escalador británico nacido en Nepal que, en 2019, escaló los 14 ochomiles, como se conoce a las montañas que superan los 8,000 metros de altura, en solo siete meses, un récord absoluto. Su hazaña quedó registrada en un documental de Netflix (Los 14 ochomiles: No hay nada imposible), y Montblanc creó para Purja el cronógrafo 1858 Geosphere 0 Oxygen LE 290, en el que se eliminó por completo el oxígeno del interior de la caja.
Con ese reloj en la muñeca, este año Nimsdai se convirtió en el primer alpinista en subir las cumbres del Monte Everest, el Lhotse y el Kanchenjunga sin el uso de oxígeno suplementario en el tiempo récord de ocho días, 23 horas y 10 minutos. Por si fuera poco, rompió un récord adicional al hacer la travesía del Everest al Lhotse sin oxígeno en un periodo de 26 horas.
A estos logros tan importantes, Montblanc suma el asombroso Star Legacy Exo Tourbillon Skeleton The Ascent, una edición limitada a ocho ejemplares en honor del primer ascenso al Mont Blanc, que se realizó en 1786. Es un reloj que encarna esa relación de la firma con la aventura que mencionamos antes. Porque, como podrás imaginarte, subir los 4,810 metros de la montaña en esa época por primera vez requirió de un enorme valor.
Para empezar, la leyenda local decía que existían peligrosas criaturas míticas en los altos pasos, por lo que era imposible llegar a la cima. Sin embargo, en 1760, el naturalista Horace-Bénédict de Saussure ofreció un premio a la primera persona que coronara el Mont Blanc y el interés creció notablemente. Después de varios intentos sin éxito, Jacques Balmat, un cazador y buscador de oro, contrató a Michel-Gabriel Paccard, un médico apasionado de la botánica y los minerales, para ayudarle a encontrar una ruta hasta la cumbre. A las 6:23 P.M. del 8 de agosto de 1786, lograron su objetivo. Regresaron un año después con Horace-Bénédict para que este también pudiera experimentar esa experiencia inigualable.
El Star Legacy Exo Tourbillon Skeleton The Ascent cuenta esta historia con todo el savoir faire de Montblanc. Cada reloj está grabado a mano con el Mont Blanc en la subcarátula de las horas y los minutos a las 12. A la izquierda hay un grabado en oro blanco de 18 quilates de Balmat escalando hasta la cumbre, mientras que a la derecha se encuentra una representación de la criatura mitológica wyvern, que, se supone, vivía en el glaciar Mer de Glace del Mont Blanc.
Hay otro detalle muy interesante vinculado a la proeza de estos alpinistas. Durante el ascenso, Balmat y Paccard llevaban mochilas de piel con sábanas, bolsos para recoger muestras de rocas e instrumentos para realizar experimentos. Uno de esos experimentos era medir la intensidad del color del cielo con un cianómetro. Varios años después, Horace-Bénédict lo usó para demostrar que el tono azul del cielo se volvía más oscuro al disminuir la humedad, por lo que dedujo que el color del cielo dependía del contenido de agua en el aire. En homenaje a ese invento, el Star Legacy Exo Tourbillon Skeleton The Ascent tiene un cianómetro que recorre la periferia de la jaula del tourbillon e indica los diversos tonos del cielo azul.
Además, este reloj incluye un Exo Tourbillon, una complicación patentada por Montblanc que se basa en posicionar el volante grande, que tiene la frecuencia baja tradicional de 18 000 oscilaciones, fuera de la estructura de rotación del tourbillon (por eso se usa el término “Exo”). Este gran volante está 3.2 mm más alto que la carátula y parece que flota sobre ella.
El mecanismo que impulsa esta maravilla es el calibre manual MB M18.69 de manufactura, un nuevo movimiento troquelado que ha requerido 12 meses de trabajo. El desafío consiste en hacer los componentes lo más delgados posibles sin debilitar la estructura, para aumentar la luminosidad. Otro reto es que el mecanismo tiene 420 ángulos internos y todos ellos han sido pulidos a mano, a menudo usando tallos de flores alpinas locales, como la genciana, en busca de la perfección.
Ficha técnica
Caja: 44 mm de oro blanco de 18 quilates
Movimiento: mecánico manual
Calibre: MB M18.69 de manufactura
Reserva de marcha: 50 horas
Funciones: horas y minutos descentrados, segundero pequeño a las 6, Exo Tourbillon patentado con una revolución por minuto
Correa: piel Sfumato azul de caimán, cierre triple de oro blanco de 18 quilates.
Hermeticidad: 30 metros
Edición limitada a 8 ejemplares
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